Diario Vasco
José luis Mendilibar, en la sala de prensa de Ipurua.
José luis Mendilibar, en la sala de prensa de Ipurua. / MORQUECHO

s.d. eibar

Una victoria para empezar a soñar

  • Mendilibar concede máxima trascendencia al duelo ante el Granada

  • El técnico del Eibar no contempla otra meta que no sea la permanencia, pero asegura que «si ganamos este partido podremos empezar a mirar a otros objetivos»

Poca gente confiesa abiertamente ser supersticiosa, pero a casi todo el mundo le da reparo expresar en alto sus deseos, por aquello de no gafarlos. Y de todos es sabido que cada vez que la palabra Europa revolotea por el vestuario azulgrana, los resultados flaquean y las ilusiones se diluyen. Por eso, nadie en el conjunto azulgrana habla abiertamente de esa posibilidad.

De hecho, José Luis Mendilibar había esquivado este asunto, aunque es consciente de que un equipo que a estas alturas está en posiciones tan adelantadas debe ser ambicioso para lograr cotas más altas. Lo había esquivado hasta ayer. El técnico azulgrana sorprendió al dejar la puerta abierta a soñar en caso de que el Eibar sea capaz de mantener esa excelente dinámica de resultados que le han permitido sumar tres triunfos en cuatro jornadas. «Los equipos que tenemos a nuestro alrededor en la clasificación están mirando a los puestos europeos», admitió el de Zaldibar, que insiste en que «hasta que consigamos el objetivo principal no vamos a pensar en otra cosa que no sea la permanencia. Si el lunes ganamos al Granada podremos empezar a mirar a otros objetivos».

Le satisface mirar la clasificación y ver a su aquipo ahí arriba, aunque él dice ser «más de sensaciones que de números. Las sensaciones que transmite el equipo son muy buenas». Están, por tanto, «en el buen camino».

Por el rendimiento que el Eibar está ofreciendo en Ipurua y por la posición que ocupa el Granada, puede parecer un partido asequible, pero Mendilibar avisa de lo motivados que vendrán los rojiblancos. «Imagino que la última victoria le habrá dado fuerzas para acercarse a los equipos que están por encima del descenso. Ahora es un equipo más sólido que hace unos meses, juega con cinco jugadores en defensa y tiene gente peligrosa y muy rápida en ataque». No se fía en absoluto de su delicada situación. «Es un equipo que está abajo, pero tiene condiciones para salir de ahí».

Según él, la escuadra nazarí muta mucho su juego, lo que dificulta la elaboración de un plan. «Los dos últimos partidos han jugado de manera diferente. Es un equipo que cambia mucho como local y como visitante. El lunes le ganaron a Las Palmas en casa siendo atrevidos, con las líneas más adelantadas. Fuera de casa suelen esperar más en su campo. Tenemos la duda de cómo nos van a jugar».

El equipo que se presente en Ipurua poco tendrá que ver con el que se encontraron en los Cármenes en la tercera jornada del campeonato. «Ha recuperado gente de la Copa África, ha fichado futbolistas en el mercado de invierno y es un equipo que ha cambiado bastante de diciembre a ahora. Son muy diferentes al rival que nos enfrentamos en la primera vuelta. Es un equipo prácticamente nuevo».

Para combatir a este equipo y al resto, el preparador azulgrana siempre recurre a su fórmula mágica, que no es otra que ser fiel a su estilo, de apoyarse mucho en su juego por las bandas y la presión asfixiante para lograr que el contrario tenga el balón el menor tiempo posible. «Nosotros tenemos que centrarnos en hacer nuestro fútbol. Crear juego por las bandas, meter muchos centros laterales y estar atentos a las segundas jugadas».

Ramis, titular

Y en la alineación que presentará figurará por primera vez en muchas semanas Iván Ramis, un jugador en el que confía ciegamente pese a su tortuosa relación con las lesiones. «Cuando ha estado bien ha ofrecido un gran rendimiento porque es muy bueno. Hay futbolistas que pueden jugar 35 partidos cada temporada y hay otros como Ramis que si juegan 20 encuentros ya estás contento».

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